Un poco de historia, ¿de dónde venimos?

En este artículo explicamos un poco sobre nuestros orígenes,  un poco de historia, ¿de dónde venimos? y las razones que nos mueven en nuestra actividad profesional cotidiana, hacia dónde vamos.

LOS INICIOS

Nuestra vocación nace en el momento mismo de nuestra etapa vital formativa. Las personas que desarrollamos la actividad de BCN Forensics, de un modo u otro, compartimos una vocación de servicio a la sociedad que nace en nuestra etapa juvenil. Estudio Química, Biología, Geología, Física, Ingeniería… ¿qué puedo hacer yo con esto que me están enseñando para servir a los demás?

Desde luego existen muchas y muy variadas respuestas a esta pregunta. Para algunos la respuesta llegó de inmediato, tenían claro que querían dedicarse a la actividad forense. Mientras tanto, para otros la respuesta se retrasó un poco más hasta que se presentó un buen día sin avisar, en la década de los 90.

Suena el teléfono y al otro lado de la línea se presenta una persona que refiere un problema que le acucia: se trata de un defecto en un cable eléctrico que fabrica y que afecta a una cantidad importante de su producción, que ya ha sido entregada a su cliente, quien formula la reclamación que estima pertinente. Naturalmente, dependiendo de la solución alcanzada, las consecuencias para sus intereses y los de sus trabajadores pueden ser nefastas y eso le hace buscar ayuda urgente. Nos disponemos a atenderle, pero al mismo tiempo nos preguntamos ¿cómo nos encontró? ¡Ni siquiera hemos hecho una pizca de publicidad acerca de nuestros servicios! ¡No buscamos al cliente, el cliente nos encuentra! Pero es que ni siquiera nos habíamos planteado hasta entonces que pudiéramos servir en un asunto como este. A fin de cuentas, pensábamos entonces, los tribunales son cosa de jueces, fiscales, abogados… ¿Qué hace alguien como yo en un lugar como este? Dicho sea con el mayor respeto.

ENTRAMOS EN PISTA, DESPEGUE INMEDIATO

Más adelante, después de ayudar con el problema de los cables defectuosos, nuestra primera aproximación al mundo forense casi sin saberlo, fueron apareciendo otro, y otro, y otro asunto más. Más productos con defectos en su fabricación, problemas de contaminación ambiental, accidentes de tráfico… Todos nuestros clientes llegaban sin que existiera relación aparente entre ellos, y seguíamos sin hacer publicidad de ninguna clase. Fue la primera ocasión para vislumbrar que estábamos ante una auténtica oportunidad de servir a la sociedad con nuestros conocimientos. El contexto resultaba novedoso, complejo y, al mismo tiempo, muy atractivo. Entretanto, nos habíamos adentrado ya en el siglo XXI.

De esta andadura previa nació un lema que pronto hicimos nuestro: «Ciencia y Tecnología al servicio de la Justicia«. Buscamos las mejores soluciones a nuestro alcance que Ciencia y Tecnología pueden ofrecer para ayudar en el esclarecimiento de hechos que, de otra manera, quedarían sin resolver.

Es en esta etapa cuando incorporamos las trazas a nuestra labor que, específicamente, se venía desarrollando en el ámbito del Medio Ambiente y el Fallo de Materiales. Incorporamos la visión de lo pequeño como elemento esclarecedor en lo global, pero también entramos en el ámbito de lo criminal al aplicar nuestro bagaje en el Análisis Forense de Trazas.

Y, aún cuando nuestra marca comercial BCN Forensics tardaría todavía un tiempo más en aparecer, nos habíamos dado cuenta de que nuestro lema necesitaba aclaraciones, como un libro lleva un segundo título que ayuda a aclarar ideas. Sin duda, éste hizo referencia a nosotros mismos y fue el lema de las tres tes, nuestras tres tes: «Trabajo, Talento, TRAZAS«. La primera T hace mención a la necesidad de trabajar para alcanzar los logros que nuestro cliente precisa. La segunda T va encaminada al uso óptimo de nuestras capacidades así como al mantenimiento y mejora de su potencial. Y la tercera T es específica de nuestra labor, y hemos encontrado en ella la explicación a numerosas cuestiones que han aflorado en nuestra actividad asistencial: lo pequeño puede ayudar a explicar lo mayor, aún cuando haya pasado desapercibido para muchos. ¡Algo así como David contra Goliat!

AÑO ONCE ¿AÑO CERO?

LLega el momento de procurarnos un nombre que nos identifique, es el año 2011. Nace la marca BCN Forensics.  Pero no, no es el año cero para nosotros, más bien es un momento de madurez. La hora de empezar a reunir experiencias y ponerlas, como siempre lo mejor que podemos, a disposición de la sociedad.

Es por tanto el momento de poner en marcha nuevas fórmulas, nuevos medios. De aquí surge la nueva web y el blog de noticias que nos permiten llegar mejor a nuestra audiencia y también a mejorar la transmisión de nuestra misión y visión. Pero también surge una nueva filosofía de trabajo que explicaremos en el siguiente apartado.

HACIA DÓNDE NOS DIRIGIMOS AHORA

Armados con estos principios hemos andado ya un buen trecho y hemos encontrado nuevas personas que, de una forma u otra, se han querido unir a nuestro proyecto. En este contexto profesional en el que las habilidades que se precisan varían notablemente de un caso a otro y son, además, tan específicas, hemos alcanzado una estructura altamente independiente, deslocalizada geográficamente y sin jerarquías, en la que cada colaborador aporta lo mejor de su experiencia en la resolución del caso. Hemos aprendido necesariamente a conseguir un grado elevado de coordinación y eficacia que nos proporcionan ventaja a la hora de abordar casos, especialmente aquellos con una base multidisciplinar. Y creemos que de esta forma proporcionaremos el mejor servicio dentro de nuestras posibilidades.

¿Y LA FORMACIÓN?

No nos hemos olvidado de la formación, le reservamos un apartado propio porque pensamos que es algo muy importante. Se trata de revertir en la sociedad aquellos conocimientos que vamos adquiriendo con nuestro desempeño profesional. Naturalmente que hay detalles que forman la ventaja estratégica sobre nuestros competidores, pero no estamos hablando de eso, nos referimos más bien a las consecuencias, positivas, que nuestro aprendizaje puede tener en terceros: estudiantes, docentes, profesionales, empresarios, policías y juristas principalmente.

Consecuencia de ello son nuestras campañas de formación en las que trasladamos a los distintos estamentos de la sociedad:

    • Los fundamentos de las Ciencias Forenses y nuestra perspectiva sobre las mismas.
    • Las consecuencias que el aprendizaje que nos ofrece nuestra labor puede tener en el mejor diseño y operación de productos y sistemas. Aprendemos del fallo e intentamos explicar cómo conseguir que no se vuelva a producir.
    • Ofrecemos nuestra experiencia a profesionales y empresarios para ayudarles a desarrollar su labor cotidiana teniendo presente la mejor defensa de sus intereses en caso de conflicto, anticipándonos de este modo e intentando soslayarlo cuando es posible.
    • Ofrecemos asimismo nuestra experiencia y nuestra visión al contexto judicial (magistrados, jueces, fiscales, letrados) y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (policía) para colaborar en la preparación de mejores estrategias a la hora de abordar, desde su perspectiva, asuntos en los que la pericia judicial y, de un modo más general, el conocimiento científico y tecnológico sean precisos.